Hay veces en los que asistimos a acontecimientos únicos como en su día fue el lanzamiento de Street Fighter II. Son momentos en los que uno sufre un shock importante y solo piensa en lo muchísimo que se está divirtiendo y en lo mucho que innova ese juego. Ahora llega Street Fighter IV con la intención de renovar todas esas sensaciones, darle aún más vidilla y coronarse como el mejor juego de lucha de nuestro tiempo actual. ¿La respuesta? Al final del artículo.
Sin olvidar sus raíces
La primera vez que probé Street Fighter IV fue en una máquina recreativa durante el E3 2008 de Los Angeles. Capcom no mostraba la versión de consola, pero sí que nos permitió acceder a la recreativa para que la prensa americana y europea pudiese entrar en contacto con él. Las primeras impresiones vinieron a confirmar la excelente pinta que mostraba en vídeos e imágenes, y es que se veía con claridad cómo el estudio encargado del desarrollo pretendía actualizar a los tiempos que corren la jugabilidad de Street Fighter II.
Puede que muchos piensen que eso no tiene ningún mérito, pues ya tenemos por la PlayStation Store el Super Street Fighter II HD Turbo Remix, que ofrece eso mismo, pero es que en esta ocasión nos encontramos ante un juego renovado que ofrece jugosas novedades en el plano jugable (nuevos personajes, nuevos ataques, ataques antiguos algo cambiados, combates online, etc.) que lo hacen mucho más especial y divertido de lo que ofrece el remake de la segunda parte.
Otro elemento que llama poderosamente la atención es el apartado gráfico que Street Fighter IV luce, pues aunque los combates se siguen sucediendo en 2D, nos encontramos con un remozado apartado gráfico en el que el colorido, el genial diseño de personajes y la fluidez con la que todo transcurre hace que sea un auténtico espectáculo visual, que no se arrugará ni en los combates online.
Jugabilidad
Lo mejor de Street Fighter IV es que ofrece el mismo sistema de lucha que Street Fighter II tenía. Esto quiere decir que habrá botón para patada y puño en sus variantes débil, medio y fuerte. Además, buena parte de los combos que se podían crear y que tanta fama han ido adquiriendo a lo largo de los años se mantienen, con lo que los amantes de Street Fighter II se verán haciendo hadoukens, Tiger Uppercuts, etc. Pero el esfuerzo por incorporar todos estos ataques habría sido en balde de no ser por un sistema de lucha rápido, eficiente y muy ajustado. En esta ocasión no tenemos ninguna queja, pues todo funciona a la perfección, ofreciendo unos combates sumamente divertidos que nos recordarán a los vividos en la entrega más famosa de Street Fighter. Eso sí, no se trata de una simple actualización, pues el juego ha incorporado una serie de ataques nuevos que otorgan unas mayores posibilidades estratégicas.
Para empezar tenemos los Focus Attack, que se activan al pulsar los botones de puño y patada media a la vez. Así, surgirá un aura negra alrededor de nuestro personaje, que servirá como defensa, y que desembocará en un potente ataque.
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Las novedades no se terminan ahí, pues también en la parte baja veremos dos barras de ataque, la de Super Combo y Ultra Combo. Éstas nos permiten realizar diferentes ataques especiales mucho más dañinos que los combos normales y que en muchas ocasiones son inevitables. A modo de ejemplo comentar el gran hadouken que suelta Ryu que causa un daño 6 veces mayor del que haría un hadouken normal, aunque habrá que saber lanzarlo en el momento exacto, puesto que si nuestro rival está muy cerca nos podrá dar un golpe rápido, que le funcionará a modo de contragolpe, y que nos hará perder toda la barra Super sin haber podido ejecutar el movimiento especial. La diferencia entre los ataques Super y Ultra están en la potencia y en la dificultad a la hora de ejecutarlos, pues los ataques Ultra son complicados, pero muy dañinos…de esos combos que son capaces de cambiar el rumbo de una partida.
No puedo dejar de lado la plantilla de luchadores que ofrecerá Street Fighter IV, pues sería poco menos que un sacrilegio. Al principio contaremos con los 12 típicos que ya aparecían en Street Fighter II (Ryu, Ken, Chun-Li, Dhalsim, Balrog, Blanka, etc.), más cuatro nuevos luchadores. Por una parte tenemos a Abel, especialista en artes marciales que, a pesar de ser bastante ágil, cuenta con unos golpes bastante poderosos. Luego está C. Viper, una chica que engaña por su escote, ya que parece una “mosquita muerta”, pero que reparte unas tortas impresionantes. Su principal fuerte está en su juego de piernas (no seáis mal pensados) y sus ataques elementales. Luego le llega el turno a la Salchicha Peleona (ups, perdón, a Rufus) que quiere llegar a ser el mejor luchador americano por delante de Ken, y la verdad es que no se lo pondrá nada fácil, pues a pesar de su tamaño y su físico cuenta con unos movimientos muy ágiles y rápidos. Le cuesta un poco cubrirse, pero no deja de ser una muy buena elección para los novatos. Ya por último está el representante mejicano, El Fuerte, que viene de la lucha libre y que nos ofrece un estilo de lucha algo diferente, pero sin que por ello sea ninguna hermanita de la caridad, pues cuenta con unos movimientos muy atractivos y poderosos.
Además de estos cuatro personajes nuevos, se irán incorporando más. Así es como llegaremos a incorporar a algunos personajes clásicos de la saga como la británica Cammy, Fei Long, Dan, Seth (que es el enemigo final de este Street Fighter IV), Akuma, Gouken, Sakura, Gen o Rose. En resumen, Street Fighter empieza suave (con sólo 16 personajes disponibles), pero al final termina por convencer gracias a los 9 personajes extra que nos ofrece. Además, aunque la plantilla de luchadores no es muy amplia (estamos acostumbrados a ver juegos con muchos más de 25), sí hay que destacar las enormes diferencias que existen entre ellos, que favorecen a una jugabilidad más variada, pues dependiendo de nuestro personaje tendremos que actuar de una manera u otra.
Llega el momento de hablar de los diferentes modos de juego que Street Fighter IV ofrece. Está claro que el más interesante de todos es el Arcade, donde podremos escoger entre un montón de diferentes niveles de dificultad mientras superamos una serie de combates hasta llegar a Seth (el enemigo final). Además, cuando hayamos pasado los ¾ del modo historia tendremos que enfrentarnos a un combate que desarrolla un poco la trama argumental de cada personaje.
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Así, veremos cómo Ken tendrá que enfrentarse a Rufus, quien está desesperado por convertirse en el mejor luchador americano, mientras que Ken solo busca un poco de diversión y un nuevo enfrentamiento con Ryu. Las escenas incluidas en el modo Arcade están bastante bien, y ayudan a conocer un poco más a los personajes, aunque queda claro que lo realmente importante son los combates en sí. Como decía, Seth es el enemigo final, quien cuenta con un gran número de golpes cogidos del resto de personajes. Además, en el primer Round se dedicará a observar nuestro juego y será fácil derrotarlo, pero en los dos siguientes será poco menos que una quimera. Al principio desesperará, pero no viene mal ese aumento en la dificultad para obligarnos a dar todo lo que llevamos dentro y a aprender a manejar mejor a nuestros luchadores.
Además del modo Arcade tenemos el modo online, que será el otro gran atractivo de este título. La interfaz es muy clara y muy sencilla, pudiendo tener enfrentamientos mientras jugamos en el modo arcade (basta con habilitar la opción cuando se nos pida). Para hacer los combates más interesantes se ha habilitado un sistema de medallas que nos hará luchar durante horas, aunque los combates 1 vs. 1 ya nos ocuparán un montón de horas gracias a su cuidada jugabilidad. Durante un centenar de partidas casi no he sufrido lag ni ralentizaciones, lo cual es una gran noticia.
El resto de modos son el entrenamiento (para aprender a realizar los diferentes golpes) y desafío, donde podremos escoger entre desafíos de contrarreloj, de misiones (donde el juego nos pedirá que realicemos un ataque en concreto) y supervivencia. En fin, una lista de modos de lo más típico en la que se echa en falta algún extra más que habría servido para redondear un producto casi perfecto.
Gráficos
El apartado gráfico de Street Fighter IV destaca por ofrecer unos modelados impresionantes, pues el aspecto de los luchadores es sencillamente genial. Si jugamos en una buena HDTV a una buena resolución, las alabanzas serán aún mayores, pues todos los personajes lucen un aspecto aún más atractivo. Además, no es solo que cuenten con un modelado muy bien trabajado, sino que las animaciones han sido muy cuidadas y no dan margen al error (aspecto muy importante en un juego de lucha). También han trabajado en las reacciones de los luchadores al encajar los diferentes golpes, mostrando algunas caras muy llamativas.
En el otro lado de la balanza están los escenarios, que no muestran la misma brillantez que los personajes. No es que Capcom no se haya esmerado, es que simplemente vemos que al intentar imitar los escenarios de la segunda entrega, hay algunos que se parecen demasiado (siendo un tanto básicos) y otros que sí que han sufrido una mejora importante (como el escenario de Chun-Li). Además, pecan de ser poco interactivos, pues no influyen mucho en el combate.
Por último, comentar que los diferentes efectos de luz cuentan con una calidad impresionante, pues nos recuerdan más a un anime que a un videojuego. Entre ellos destaca el aura negra que sale de nuestro personaje al realizar el ataque de puño medio + patada media, el de los hadouken o el de los movimientos de M. Bison.
Así pues, se podría decir que Capcom ha realizado un verdadero trabajo “de chinos”, pues ha cuidado a la perfección el modelado, animaciones, efectos de luz y reacciones de los personajes, pero que no llega a ser redondo por el diseño de alguno de los escenarios y por los tiempos de carga algo elevados que tenemos que sufrir justo antes de los combates.
Música/Sonido
Cuando me puse a jugar a Street Fighter IV, me esperaba una intro buenísima, y la verdad es que la escena inicial ofrece un espectáculo visual muy atractivo, pero la música no parecía acompañar, pues me recordaba más a las sintonías de series como Pokémon que a otra cosa. Puede que me esté haciendo viejo, pero aquí la banda sonora debería de haber tenido mucho más guitarreo del que tiene la sintonía principal del juego. Aún así, nos hará gracia durante un tiempo hasta que la aborrezcamos.
Por suerte sólo tendremos que aguantar ese tema en los menús, pero una vez que nos pongamos a jugar escucharemos melodías típicas y los efectos de sonido de siempre (como el Tatsumaki Senpukyaku, el hadouken, etc.) Sea como sea, no puedo más que rendirme ante el buen trabajo de Capcom pues, a pesar de ser un tanto simple, es todo lo que los fans de Street Fighter esperarían de él.
Edición Española
El juego viene con textos de pantalla y manual en castellano. No se le puede pedir nada más, porque haber doblado las voces habría significado perder los gritos de guerra que tanto caracterizan a cada luchador, y ningún fan de Street Fighter que se preste habría querido eso. Por tanto, ninguna queja al respecto. Además, el juego sale a un precio recomendado de 60 euros.
Conclusión
Street Fighter IV es EL JUEGO DE LUCHA. Tiene algunos aspectos mejorables, pero lo más importante, que es el combate en sí, resulta de lo más divertido y emocionante que te puedes encontrar. Viene a ser la demostración de que a Capcom no se le ha olvidado hacer grandes juegos de lucha, pues la cuarta entrega de esta famosa saga ha conseguido rejuvenecer el género con un título espectacular (visualmente hablando) y rabiosamente adictivo.
Lo mejor: El sistema de lucha sigue siendo tan bueno como siempre. El apartado gráfico. Los combates online aportan muchas horas de diversión. El elenco de personajes.
Lo peor: Pequeños fallos en el apartado gráfico. Ojalá hubiese incluido más modos de juego.
Historia: --
Gráficos: 9
Música/Sonido: 7
Jugabilidad: 9
Edición Española: 8
Multijugador: 9
 
Alternativas:
- Soul Calibur IV
- Super Street Fighter II HD Turbo Remix
- Mortal Kombat vs. DC Universe
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